
Hace un tiempo, aislamos esta casa en la población de Gavà (Barcelona). El resultado no pudo se más satisfactorio, especialmente en lo que respecta al ahorro en calefacción. Tan sólo diez meses después, y según la valoración del propietario, éste cifraba el ahorro en calefacción en aproximadamente un 60% respecto de los costes de años anteriores a que Biomarc insuflara la celulosa para el aislamiento térmico de la su vivienda. La rehabilitación energética a través del aislamiento térmico es pues una forma sencilla, rápida y económica de propiciar el ahorro energético, lo que se traduce en una sensible reducción de gastos en el hogar, además de aumentar la sensación de confort y calidad de vida.
Con el sistema de insuflado de celulosa es habitual reducir hasta un 50% el consumo energético de una casa. Puede ser incluso superior dependiendo del acondicionamiento de la vivienda.